Ricas en fibra, hidratos de carbono y proteínas vegetales, las legumbres son uno de los alimentos más nutritivos, Por ello, se recomienda incluirlos en tu dieta para obtener sus beneficios. Sin embargo, estos pueden generar gases y Malestar digestivo, que se puede evitar con algunas recomendaciones de los nutricionistas.
En esta entrega repasaremos qué debemos hacer para evitar los gases que generan las legumbres, de acuerdo con las recomendaciones de la nutricionista Sandra Moñino, quien explica en la Cadena Onda Popular Española 3 trucos clave para conseguirlo.
Legumbres: fuente de nutrientes
Si bien todas las legumbres aportan beneficios para la salud, no todas son iguales, ya que los frijoles blancos, negros y pintos contienen un alto nivel de proteína vegetal; las lentejas son ricas en hierro; Los garbanzos son ricos en minerales como calcio, potasio, magnesio y hierro vegetal.
Mientras que los guisantes aportan potasio, magnesio y vitamina B y el maní, que es una legumbre, aunque había sido considerado un fruto seco, aporta grasas y proteínas.
Cómo evitar que las legumbres causen molestias
Lo cierto es que a pesar de los múltiples beneficios, las legumbres pueden provocar molestias intestinales, incluidos gases.
Moñino recomienda 3 cosas básicas para evitar los gases: dejar en remojo con el tiempo suficiente, añadir especias que reduzcan los gases y cocinar a fuego lento.
Remojar desde la noche anterior: la principal recomendación del especialista y es una práctica común entre las personas que cocinan legumbres, es remojarlas en agua por al menos 12 horas, preferiblemente la noche anterior, ya que esto permitirá que se hidraten y luego se desecha el agua del remojo. y se vuelve a agregar agua cuando se va a cocinar.
Añade especias que reduzcan los gases.: Un truco que puede ayudar a reducir los efectos de los gases de las legumbres es añadir especias como el clavo, ya que estos “reducen la cantidad de gases que estas pueden aportar y las acompañan muy bien con una buena ración extra de proteínas, como por ejemplo “Puede ser un buen huevo cocido, y con una buena ración de ensalada”, explica.
Cocine a fuego lento: La cocción lenta es clave para evitar gases, así que “mételas en una olla y déjalas al menos dos o tres horas para que se cocinen bien”. Este paso es muy importante, y si no puedes realizarlo, se recomienda comprar legumbres cocidas de venta en los supermercados en tarros. La explicación que da Moñino es que las legumbres se han dejado mucho tiempo en remojo, mucho tiempo cocidas “y luego suelen saber mucho mejor”.
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