Hermen Hulst, director general de Sony Interactive Entertainment (SIE), destaca en el declaración qué “Después de pensarlo mucho, hemos decidido que el mejor camino a seguir es abandonar permanentemente el juego y cerrar el estudio”.
Además, Hulst escribió que SIE había “pasado un tiempo considerable estos últimos meses explorando todas nuestras opciones”, pero finalmente decidió cerrar el estudio, que había adquirido en abril de 2023. El correo electrónico también anuncia la decisión de SIE de cerrar Neon Koi, un Estudio alemán trabajando en un juego de acción para móviles.
“Como parte de nuestros esfuerzos continuos para fortalecer el negocio de estudios de SIE, hemos tenido que tomar una decisión difícil con respecto a dos de nuestros estudios: Neon Koi y Firewalk Studios. Quiero agradecer a todo el equipo de Firewalk por su trabajo, su espíritu creativo y su dedicación. “El género de disparos en primera persona PvP es un espacio competitivo que evoluciona constantemente y, lamentablemente, no alcanzamos nuestros objetivos con este título”.lee el comunicado de Sony.
Concord y Firewalk se despiden sin logros
Unos minutos después de que se anunciara el cierre del estudio, Firewalk confirmó la noticia y agradeció a la afición y jugadores por estos 6 años en los que aprendieron, mejoraron y crearon una propuesta que prometía ser la revolución de los hero shooters.
El título estuvo en desarrollo por Firewalk Studios de forma independiente durante casi una década, hasta que el estudio junto con el juego fue adquirido por Sony Interactive Entertainment durante 2023.
Sin embargo, no se obtuvo lo esperado. En Steam, el número de jugadores online nunca superó las 700 personas y se estima que, durante su primera semana, sólo vendió 25 mil unidades.
Concord, que se lanzó por primera vez el 23 de agosto para PS5 y PC, tuvo problemas al principio con la baja asistencia antes de que Sony anunciara repentinamente que lo descontinuaría el 3 de septiembre.
Un representante dijo Bloomberg que Firewalk Studios tenía 172 empleados que perderán sus puestos de trabajo. Según Bloomberg, el proyecto costó al menos 400 millones de dólares y pasará a la historia como una de las “grandes promesas del juego que nunca se cumplieron”.