Para el próximo año, el nuevas actividades y festivales que requieren permisos de la Ciudad de Nueva York para cerrar vías públicas, lo más probable es que no estén autorizados o tengan muchos más requisitos. Esta medida municipal está asociada a exigencias presupuestarias que buscan recortar horas extras de la nómina de los Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York (NYPD).
“Esto no significa que las grandes paradas que forman parte de la historia de la Gran Manzana “Van a ser cancelados”, dijo. El diariouna fuente municipal.
La propuesta, presentada por el Oficina de Permisos de Actividades de Calle (SAPO) y revelado por la publicación Gothamist, establecería una prohibición de permisos para “nuevos festivales”, que se mantendrá vigente durante todo 2025 con el objetivo de “ahorrar en costosos compromisos de vigilancia”.
Esta oficina municipal expide permisos para festivales callejeros, eventos de plaza, pequeñas producciones musicales, fiestas callejeras, mercados de agricultores, ruedas de prensa, ferias de salud y otras actividades.
Cada año, SAPO emite autorizaciones para más de 200 ferias callejeras y más de 5.000 eventos.
menos presupuesto
El presupuesto de horas extras de los Uniformados, para cubrir este tipo de actividades, superó los $1.000 millones en el último ejercicio fiscal, es decir, 200 millones más de lo previsto originalmente, informó la publicación digital.
Para el nuevo ejercicio sólo se han destinado 564 millones, aproximadamente la mitad de lo que se gastaba anteriormente.
El Concejo Municipal celebrará una audiencia pública el 20 de noviembre, ofreciendo a los neoyorquinos la oportunidad de expresar opiniones y plantear críticas sobre la nueva política.
En este momento se cruzan dos visiones: por un lado, las iniciativas comerciales y por el otro, los vecinos que han manifestado sentirse abrumados por el cierre de vías, especialmente durante el verano.
La recomendación general de la policía de Nueva York es que implementar efectivamente “Utilizar más eficazmente los recursos policiales y controlar los costos de las horas extras”. Se ha recomendado que la Oficina de Permisos de Actividades Callejeras ejerza su discreción denegar solicitudes de permiso para nuevos eventos en el año calendario 2025.
La política de reducir al máximo este tipo de actividades se puso en marcha por primera vez después de los ataques terroristas del 11 de septiembre y fue mantenido durante el mandato del ex alcalde Mike Bloomberg, en medio de fuertes quejas de que el número de festivales callejeros en varias cuadras y varios días se había salido de control.
“Los Los festivales y eventos al aire libre son parte del espíritu de Nueva York. Y por último, siempre se buscarán alternativas, para que se realicen de forma segura para todos”, concluyó una fuente municipal.
