Espaillat.– Residentes del municipio de Gaspar Hernández, en la provincia Espaillat, denunciaron la tala indiscriminada de manglares y árboles costeros protegidos en la comunidad de Gen, supuestamente bajo el pretexto de ampliar calles locales.
Los comunitarios expresaron su indignación ante la devastación de una extensa área de mangles donde anidan especies protegidas como tortugas y aves migratorias, generando una ola de rechazo colectivo.
La intervención incluyó el uso de maquinaria pesada y habría sido ejecutada con base en un permiso otorgado por el Ministerio de Medio Ambiente, a solicitud del alcalde municipal de Gaspar Hernández, Abelito Suriel, para la ampliación de la calle Andrea Santana.
Sin embargo, sectores preocupados por el impacto ambiental aseguran que el permiso aprobado sólo contemplaba la remoción controlada de árboles específicos —dos almendros, dos acacias, dos guamas, una guácima y la poda parcial de un samán— sin que se autorizara la tala de mangles ni de otras especies protegidas por ley, como el mangle rojo, blanco, negro, botón, uvas de playa o cocoteros.
Sospechas sobre interés privado
De acuerdo con denuncias de los residentes, la intervención podría estar encubriendo la apertura de un acceso privado hacia la playa, en beneficio del empresario Rafael Marte, señalado como presunto propietario de los terrenos intervenidos.
La comunidad exige una investigación inmediata por parte del Ministerio de Medio Ambiente para determinar responsabilidades y esclarecer por qué se permitió la afectación de un ecosistema protegido.
Diversos sectores comunitarios han advertido que no tolerarán más daños al litoral, considerado crucial para la biodiversidad local, la protección contra inundaciones y el equilibrio ecológico de la zona.