El consumo de pez Se recomienda como parte de una dieta equilibrada que nos permite mantener a raya el colesterol, prevenir enfermedades cardiovasculares y mejorar la memoria. Entre De los pescados ricos en ácidos grasos omega-3 hay uno que destaca por su alto valor nutricional: el eglefino.
El eglefino es un pescado de carne firme y sabor similar a la merluza, con un sabor delicioso, bajo contenido en grasas, rico en proteínas de alta calidad y ácidos grasos omega-3.
El eglefino se puede consumir en filetes, deshidratado y en alimentos como el surimi, elaborado con proteínas de este pescado.
La composición nutricional de este pescado, de la familia del bacalao, ayuda, según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, para mantener buenos niveles de omega-3, mejorar la circulación sanguínea reduciendo la fijación del colesterol en las arterias, prevenir infartos y trombosis cerebrales y proteger el corazón.
Es rico en selenio, yodo y fósforo, además de vitaminas del grupo B como: Vitamina B6, niacina y especialmente B12.
A estudiar Publicado por el Ministerio de Agricultura español, afirma que “una ración de eglefino supera las ingestas diarias recomendadas de vitamina B12 para el grupo de población descrito anteriormente”.
Beneficios del eglefino
Omega-3: yEl pescado es una de las mejores fuentes de ácidos grasos omega-3, un tipo de grasa poliinsaturada vital para fortalecer las neuronas. mantener el corazón sano y protegido frente a un ictus, según estudios científicos.
La mejor forma de consumir Omega-3 es a través de alimentos o suplementos, ya que el organismo por sí solo no lo produce.
Proteínas: Como hemos mencionado, tiene un alto valor nutricional porque es rico en proteínas. De acuerdo a estudios realizados En los animales existe una “predisposición a una menor acumulación de grasa visceral y un aumento de la masa muscular en aquellos alimentados con proteína de surimi/abadejo”.
Selenio: El abadejo es rico en selenio, vital para la función de la glándula tiroides, la reproducción, la producción de ADN, para proteger el cuerpo contra infecciones y daños causados por los radicales libres, según el Institutos Nacionales de Salud (NIH).
Yodo: El bacalao, la lubina y el eglefino son buenas fuentes de yodo.n oligoelemento clave para que las células transformen los alimentos en energía. El yodo ayuda al funcionamiento de la tiroides y a la producción de hormonas tiroideas, explica. Línea Médica Plus en su sitio web.
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