Phillip Pines afirma que trabajó para el rapero entre 2019 y 2021. Dice que durante este período fue tratado “como un animal que juega a buscar para demostrar su lealtad«, y que recibió amenazas de que sería despedido y excluido de la industria si se negaba a hacerlo.
Según la denuncia, una de las obligaciones de Pinos era estar siempre preparada para abastecer lo necesario durante estas vacaciones. Según la demanda, el dormitorio de cada rapero o habitación de hotel tenía que estar equipado con «luces rojas, cubitos de hielo, alcohol, marihuana, paquetes de miel para la libido masculina, aceite de bebé, lubricantes, toallas, drogas ilegales y potentes juguetes sexuales». Incluso afirma que en ocasiones tuvo que entrar en medio de reuniones, que podían durar varios días, para entregar suministros adicionales.
Eliminar evidencia
Una vez terminadas las vacaciones, Pines recibió instrucciones de eliminar cualquier evidencia de drogas, condones, juguetes sexuales y manchas de fluidos corporales y orina de las sábanas y muebles. También tuvo que deshacerse de cualquier material audiovisual que pudiera incriminar a Diddy, incluidos los que se encontraban en sus computadoras y teléfonos.
Finalmente, se encargó de asegurarse de que nadie hablara de lo sucedido, así como de sobornar a los empleados de limpieza del hotel para evitar que denunciaran cosas que luego habría que facturar. Además, Pines alega que cuando viajaba con Combs, él era responsable de llevar su bolso ‘MVP’, supuestamente lleno de drogas y juguetes sexuales.
Por su parte, el equipo legal del rapero dijo en un comunicado a People que “no importa cuántas demandas se presenten, no cambiará el hecho de que el Sr. Combs nunca ha agredido o traficado sexualmente a nadie, hombre o mujer, adulto”. o menos.
Fuente: RT
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