Los clásicos del anime en los años 80: la década que sentó las bases

La década de los 80 fue el inicio de una verdadera revolución en el anime y manga japonés. En estos años surgieron obras que definieron el rumbo del shōnen, el shōjo y los géneros de acción, romance y ciencia ficción, creando franquicias que aún hoy mantienen legiones de seguidores.

Dragon Ball (1984 manga / 1986 anime) se convirtió en la gran aventura de Gokú y sus amigos en la búsqueda de las esferas del dragón, dando origen a una de las sagas más influyentes de la historia. A la par, Saint Seiya (1986) trajo la épica de los Caballeros del Zodiaco, guerreros con armaduras ligadas a las constelaciones que conquistaron a toda Latinoamérica.

El deporte también tuvo un papel protagónico con Captain Tsubasa (1981/1983), conocido como Supercampeones, que inspiró a miles de niños a soñar con jugadas imposibles en el fútbol. La acción extrema llegó con Hokuto no Ken (1983/1984), donde Kenshiro brillaba en un mundo post-apocalíptico.

Por otro lado, City Hunter (1985/1987) entregó una mezcla de comedia, misterio y acción con el carismático Ryo Saeba. En el terreno del romance y la vida cotidiana, Rumiko Takahashi dominó la escena con Urusei Yatsura (1978/1981), Maison Ikkoku (1980/1986) y más adelante Ranma ½ (1987/1989), que combinó artes marciales con humor y transformaciones insólitas.

El drama adolescente y deportivo llegó con Touch (1981/1985), mientras que el cyberpunk alcanzó su máximo esplendor con Akira (1982 manga / 1988 película), obra maestra que revolucionó la animación japonesa y la proyectó a nivel global.

En resumen, los 80 fueron la época donde se consolidaron los pilares narrativos y estéticos que marcaron el anime moderno, dejando clásicos que aún hoy son referencia cultural.