Lazarini denunció que por casi tres semanas (18 días consecutivos), las autoridades israelíes no han permitido la entrada de ayuda humanitaria –agua, alimentos y medicamentos- a la Franja de Gaza, lo que organizaciones en el terreno temen que pueda provocar hambre entre una población de 2,1 millones de personas.
“En los últimos días, se ha confirmado la muerte de otros cinco miembros del personal de UNRWA, lo que eleva la cifra de muertos a 284 (desde el inicio de la guerra en octubre de 2023)”, dijo el jefe de esta organización, Philippe Lazzarini, en un comunicado publicado en X. “Eran profesores, médicos y enfermeros que atendían a los más vulnerables”, añadió.
En otro ataque ayer, un trabajador búlgaro de la ONU murió en una residencia para personal internacional en Deir el Balah, en el centro del enclave, y otros cinco extranjeros resultaron heridos.