El Primer Ministro israelí, Benjamín Netanyahu se apresuró a celebrar la elección de Donald Trump y la describió como “el mayor regreso de la historia”. Bezalel Smotrich e Itamar Ben-Gvir, ministros de extrema derecha de su coalición de gobierno, tuitearon su entusiasmo incluso antes de que se conocieran oficialmente los resultados.
Netanyahu estaba entre “el primero en llamar” al presidente electoinformó su oficina en un comunicado. “Su conversación fue cálida y cordial”. y ambos “acordaron trabajar juntos por la seguridad de Israel, y también discutieron la amenaza iraní”, añadió.
La victoria de Trump se produjo pocas horas después de que Netanyahu despidiera a su ministro de Defensa, Yoav Gallant, considerado un contacto clave del gobierno de Joe Biden en el gobierno israelí.
Israelíes contentos con la victoria de Trump
Según una encuesta postelectoral, publicada por el Canal 12 de la televisión comercial, la 67% de los israelíes Dijeron que estaban “felices con la victoria de Trump”. Eso también se notó en las calles.
Sin embargo, para algunos críticos del gobierno de Netanyahu, el regreso de Trump no augura nada bueno.
“Creo que, para Smotrich y Ben-Gvir, tener el tipo de Gobierno israelí que tenemos hoy, el Gobierno más extremista en la historia de este país, Fue algo así como ganar la lotería israelí, dijo Yehuda Shaul, cofundador de Ofek, una grupo de expertos israelí independiente.
“La llegada de Trump a la Casa Blanca es como si ellos también hubieran ganado la lotería americana“, afirmó.
El precedente de la primera Administración Trump
Durante su primer mandato, Trump tomó varias acciones políticas controvertidas en apoyo a Israel. En 2017, reconoció a Jerusalén como la capital y trasladó allí la embajada de Estados Unidos desde Tel Aviv.
También reconoció la soberanía de Israel sobre los Altos del Golán, que Israel arrebató a Siria en 1967 y anexó ilegalmente en 1981.
Trump también es considerado el arquitecto de la “Acuerdos de Abraham” que normalizó las relaciones con algunos países árabes, dejando de lado a los palestinos. Algunos analistas creen que, en su segunda presidencia, promoverá la normalización de las relaciones entre Israel y Arabia Saudita.
Sin embargo, en los últimos años las relaciones entre Trump y Netanyahu se han enfriado. Tras perder las elecciones de 2020, Trump pareció perplejo cuando el gobernante israelí felicitó a Joe Biden.
Y tras los ataques terroristas lanzados por Hamás el 7 de octubre de 2023 contra Israel, Trump criticó a Netanyahu por no estar preparadodiciendo que eso no habría sucedido si hubiera seguido siendo presidente.
El conflicto palestino
La situación en Oriente Medio requerirá sin duda la atención de la próxima Administración estadounidense. Trump no ha presentado ningún plan político importante para la región, excepto Afirman que pondría fin a las guerras en Gaza y el Líbano.sin explicar cómo.
“Trump le dejó claro a Netanyahu que quiere que esto termine para el 20 de enero.cuando entre a la Casa Blanca”, señala Alon Pinkas, ex diplomático israelí en Nueva York.
En abril, Trump dijo que Israel estaba perdiendo “la guerra de relaciones públicas en Gaza” e instó al país a “ponerle fin rápidamente”.
Sin embargo, según Pinkas, Netanyahu está contento porque “Trump no lo va a presionar en absoluto con respecto a la cuestión palestina”. Durante su primera administración, Washington no adoptó la posición común de que los asentamientos israelíes en la ocupada Cisjordania son ilegales según el derecho internacional.
“Me temo que nos vamos a enfrentar Carta blanca para que el Gobierno israelí haga lo que quiera en Cisjordania“dijo Yehuda Shaul, cofundador de Breaking the Silence, una organización de ex soldados críticos con la ocupación militar israelí. “Y temo que el riesgo de reconstruir los asentamientos en Gaza haya aumentado enormemente”.
Euforia entre los colonos israelíes
El periódico israelí Yedioth Ahronoth informó el pasado jueves sobre la “Estado de ánimo eufórico” de los colonos israelíes por la reelección de Trump. También indicó que sus dirigentes tienen un plan de acción para después de que asuma el poder.
Esto incluiría el lanzamiento “una iniciativa para aplicar la soberanía israelí en Judea y Samaria y ‘apoderarse del territorio’ para el establecimiento de nuevos asentamientos avanzados en el norte de la Franja de Gaza”. Aunque Netanyahu ha negado cualquier plan para restaurar los asentamientos israelíes en Gaza, las declaraciones de funcionarios y ministros israelíes han sugerido lo contrario.
Se estima que El 90% de los habitantes de la Franja de Gaza han sido desplazados durante la guerra. Uno de ellos es Shadi Assad, de 22 años. Tiene pocas esperanzas de que una nueva administración estadounidense aporte algo positivo y sólo quiere volver a casa.
“Vivimos en un estado de humillación sin precedentes.Ya a nadie le importa”, dijo. “Sólo queremos que la guerra se detenga, con o sin acuerdo, con o sin Trump”, concluyó.
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