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EDITORIAL.- Las esponjas de baño, presentes en muchos hogares como accesorio imprescindible de higiene personal, están siendo puestas en el punto de mira por especialistas en dermatología. Si bien son valorados por su capacidad para exfoliar la piel y proporcionar una limpieza más profunda, los expertos advierten sobre los riesgos asociados con un uso inadecuado y un mantenimiento deficiente.
el dermatólogo Ana Molina, en el podcast “Mejor que ayer”Resaltó que las esponjas de baño tienden a retener humedad, residuos de jabón y células muertas, convirtiéndose en un ambiente ideal para la proliferación de bacterias y hongos. Estos microorganismos pueden transferirse a la piel durante el uso, aumentando el riesgo de infecciones cutáneas como la foliculitis.
Alternativas naturales como tienen quetambién conocido como servilleta del pobre.
El musú, cuyo nombre científico es esponja vegetal egipciaPertenece a la familia Cucurbitaceae y es originaria del sur de Asia. En República Dominicana su uso está muy arraigado, no sólo en la higiene personal, sino también como herramienta para el lavado de platos, lo que lo convierte en un ícono de sostenibilidad.
¿Cuándo y cómo utilizarlos?
Aunque las esponjas no son imprescindibles para una limpieza eficaz, quienes opten por utilizarlas deben tomar ciertas precauciones:
- Materiales más seguros: Opta por esponjas naturales o de silicona, que suelen ser más higiénicas.
- Mantenimiento adecuado: Enjuáguelos bien después de cada uso, séquelos al aire y reemplácelos cada 3-4 semanas.
- Uso moderado: Limitar su aplicación a zonas con mayor acumulación de suciedad, como axilas, pies y espalda.
La Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV) sugiere incluso evitar las esponjas en pieles sensibles, priorizando el uso de manos y jabones suaves con un pH similar al de la piel (5,5).
Consejos para una ducha saludable
Adoptar hábitos sencillos puede marcar una gran diferencia en la salud de tu piel:
- Utilice agua tibia, entre 33 y 37 °C, para conservar los aceites naturales.
- Evite la exfoliación diaria; una vez por semana suele ser suficiente.
- Seca suavemente tu piel después de la ducha y aplica crema humectante para restaurar la barrera protectora.
La higiene y el cuidado de la piel no requieren cambios drásticos, sino atención a los pequeños detalles que pueden prevenir problemas y mantener una rutina saludable.
Fuente Informativa
