Después de décadas explorando los rincones del universo con misiones que desafiaron los límites del universo, la NASA acaba de dar un nuevo paso en la conquista del cosmos a través de un dispositivo que podría brindar una nueva forma de observar el espacio: el telescopio SPHEREx.
Recién llegado al espacio, la agencia reveló, a través de un comunicado, que SPHEREx se puso en marcha como un observatorio infrarrojo que buscará descifrar los secretos más antiguos del universo mediante la captura de cientos de exposiciones diarias. Incluso, y de acuerdo con la misma agencia estadounidense, el telescopio ya comenzó a enviar sus primeras imágenes, marcando el inicio oficial de una ambiciosa misión que buscará descifrar los secretos más antiguos del universo.
A diferencia de sus predecesores, SPHEREx no se enfoca en una región específica del cielo: su objetivo es más amplio. Cada seis meses, será capaz de mapear todo el firmamento visible desde la Tierra, construyendo un modelo tridimensional del universo que no solo mostrará dónde están las galaxias, sino también cómo evolucionaron a lo largo de miles de millones de años.
Las primeras imágenes capturadas por SPHEREx aún no están listas para el análisis científico detallado, pero eso no ha impedido que los ingenieros celebren un inicio exitoso: los sistemas ópticos, térmicos y los detectores del telescopio funcionan a la perfección, justo como se planeó desde la Tierra. Esto es crucial, ya que cualquier fallo en el enfoque o en la calibración habría sido irreversible una vez en órbita.