En respuesta a las tasas de utilización históricas de estos programas, las Escuelas Públicas de la Ciudad de Nueva York volvieron a solicitar fondos para este programa al Departamento de Salud y Servicios Humanos de EEUU, para además priorizar la expansión de Early Head Start, el cual atiende a bebés y niños pequeños menores de tres años.
La Ciudad de Nueva York realizará una importante inversión para expandir el programa 3-K en toda la Gran Manzana. También se suman fondos para garantizar la permanencia de programas de apoyo que estaban en riesgo ante los recortes federales. Se trata de una buena noticia para los estudiantes con discapacidades y otros grupos vulnerables que viven bajo la línea de la pobreza.
El alcalde Eric Adams, confirmó este miércoles fondos que ascienden a los $167 millones en el Presupuesto del Año Fiscal 2026, para fortalecer la financiación de programas esenciales de educación infantil temprana, que benefician a las comunidades más vulnerables de los cinco condados.