El dolor humano detrás de la tr4ged1a en Jet Set quedó plasmado en un video que conmueve a la nación. Las cámaras captaron el preciso momento en que un hombre recibe la devastadora noticia del fall3cim1ento de su esposa, una de las 27 v1ct1mas m0rt4les que dejó el colapso del techo del reconocido centro nocturno.
La expresión del hombre lo dice todo: incredulidad, desesperación y un vacío imposible de llenar. Mientras caía de rodillas entre las luces de las patrullas, a su alrededor decenas de familiares vivían su misma pesadilla, gritando nombres y buscando respuestas entre el caos. La escena resume la crudeza de una noche que comenzó con música y terminó en tr4g3dia.
Equipos de rescate trabajan contra reloj entre los escombros de lo que horas antes era un templo de la diversión. Bomberos, médicos y voluntarios no dan abasto ante la magnitud de la emergencia, mientras las ambulancias siguen transportando heridos hacia los hospitales. «Nunca imaginé que ir a bailar terminaría así», declaró entre lágrimas un sobreviviente.
Las preguntas sobre las causas del colapso crecen al mismo ritmo que el dolor de las familias. Testigos reportaron haber escuchado un crujido sospechoso minutos antes del derrumbe, mientras el merenguero Rubby Pérez animaba el lugar. Autoridades ya iniciaron una investigación exhaustiva para determinar responsabilidades por lo que podría tratarse de un fallo estructural.
Entre las víctimas confirmadas hay empleados, estudiantes y hasta tres menores de edad, según reportes preliminares. El caso más conmovedor es el de una joven madre que asistió a celebrar su cumpleaños y nunca regresó a casa, dejando huérfanos a sus dos hijos.
La discoteca Jet Set, ícono de los «lunes bailables», hoy es escenario de duelo nacional. Mientras las familias reclaman justicia, el país entero se une en oración por las víctimas y sus seres queridos. Esta tragedia debe servir como llamado urgente a reforzar los protocolos de seguridad en todos los centros de entretenimiento del país.
Si tienes información sobre desaparecidos o deseas apoyar a los afectados, comparte solo datos verificados. En medio del dolor, la solidaridad debe prevalecer sobre el morbo.