Es común considerar que el nacimiento del mito El OVNI tuvo lugar el 24 de junio de 1947, cuando Kenneth Arnold, un piloto privado de Boise, Idaho, sobrevolaba las Montañas Cascade en el estado de Washington, y encontró nueve objetos parecidos a lentes o, dicho de otro modo, como dos placas planas pegadas entre sí por sus bordes, una hacia arriba y la otra hacia abajo.
En su declaración, Arnold dijo que estaban muy brillante y que saltó como una piedra plana al chocar en una trayectoria casi paralela al agua, que rebota, sube, avanza, vuelve a caer rebotando, etc. Al llegar al aeropuerto de destino comentó que parecían “platillos voladores” y de ahí surgió su primer nombre. Aunque a muchos les pareció ridículo y trataron de hacerlo más serio llamándolos ovnis.
La información, difundida por Associated Press y otras agencias, tuvo gran repercusión. Para entender por qué una noticia bastante aburrida tuvo tanto alcance debemos situarnos en su lugar y momento. En Estados Unidos, dos años después de terminar la segunda guerra mundial, Había miedo en el aire de que los ex nazis construyeran más máquinas voladoras para espiar. o atacar al país que los había llevado a la derrota.
Su propagación dio lugar a nuevos avistamientos. Hoy sabemos perfectamente que Es común que, cuando se difunde que alguien ha visto un OVNI, se produzca una oleada de sucesos de este tipo. Este hecho quedó patente en el estudio que realizamos durante los años 1967 a 1972 en la Universidad Complutense de Madrid, Carmen Tamayo, David G. López, Miguel Amírola, Vicente Olmos y el autor de este artículo, que titulamos “Bases para un modelado teórico del fenómeno OVNI”.
Sin embargo, en 1947 esto fue ignorado y muchos platillos voladores llamaron la atención del gobierno de los Estados Unidos. Decidieron estudiarlo, Temor de que fuera una amenaza a la seguridad nacional.. El programa de investigación que pusieron en marcha se llamó proyecto Sign y, en la justificación del mismo, No sólo se habló de naves experimentales de potencias extranjeras, sino también de posibles extraterrestres.. Así, se aceptó oficialmente que los supuestos platillos volantes podrían estar relacionados con visitas desde otros mundos.
Si esta idea no hubiera caído en una sociedad dispuesta a creerla, se habría extinguido instantáneamente. Pero este no fue el caso. En aquella época, la cultura occidental era una excelente caldo de cultivo para el mitopor varias razones.
Podríamos remontarnos a pensadores que han influido en nuestras ideas, como el Los griegos Anaxágoras o Metrodoro de Quíosi, el sirio Luciano de Samosata o, ya en la Edad Moderna, Bruno Giordanoquemado en la hoguera por pensar que había muchos mundos habitados, pero eso nos llevaría demasiado lejos. Nos centraremos en antecedentes mucho más cercanos. Así, en 1877, el astrónomo Giovanni Schiaparelli Aprovechó que Marte estaba muy cerca para dirigir allí su telescopio: lo que vio fueron canales artificiales.
El italiano concluyó que canales tan grandes sólo podrían haber sido construyó los marcianos. De repente, Marte estaba habitado. Poco después, en 1898, el El famoso escritor HG Wells escribe la novela “La guerra de los mundos”, en la que los marcianos nos invaden.. El trabajo fue un gran éxito y la ciencia ficción estuvo llena de extraterrestres. Podríamos pensar que esta literatura marginal apenas tuvo impacto social. Sin embargo, Orson Welles vino a mostrarnos lo contrario.
En 1938, junto con la compañía de teatro Mercury, representó la obra de Wells en la radio (no había televisión). Para hacerlo más real, lo retransmitieron como si fuera un noticiero. Y el pánico se extendió. Los habitantes de Nueva Jersey huyeron en masa y se produjeron innumerables accidentes. Si la gente lo creía, no era algo absurdo.algo fuera de lo posible. Les afectó porque estaba dentro de su visión del mundo. Por tanto, vemos que, en 1938, nueve años antes del caso Arnold, la gente ya estaba dispuesta a creer en invasiones de otros mundos.
Muy poco después, el 10 de junio de 1947, un incidente en Roswell (Nuevo México), que en su época pasó desapercibida y tuvo muy poca o ninguna influencia. Sin embargo, gracias al libro publicado por Charles Berlitz, fundador de una cadena global de centros de enseñanza de idiomas, se ha convertido en uno de los pilares de la mitología contemporánea.
En el población de Roswellencontraron restos que no resultaron demasiado extraños, pues se trataba de trozos de madera con dibujos que recordaban al alfabeto chino y una sustancia similar al plástico blando. Nada que hubiera llamado la atención si el mundo no hubiera estado bajo el influencia del evento de Arnold.
Unos meses más tarde se produjo otro hito en la historia del mito. Se trata del muerte del capitán de aviación Thomas Mantell, el 7 de enero de 1948. Cuatro aviones de combate F-51D Mustang regresaron a la Base Godman, Fort Knox, Kentucky. El controlador aéreo informó que había un objeto no identificado entre las nubes y envió la orden de ir a investigar. Un avión se quedó sin combustible y aterrizó. Los tres que quedaron continuaron con la misión.
El cuerpo extraño estaba más alto de lo que parecía.. Para continuar fue necesaria una máscara de oxígeno. Dos de ellos no tenían casi nada y se dieron por vencidos. Sólo quedó Mantell. “Está directamente delante y encima de mí, moviéndose aproximadamente a la mitad de mi velocidad… Parece ser un objeto metálico o el posible reflejo del sol sobre un objeto metálico, y es de un tamaño tremendo… Sigo subiendo. .. Estoy tratando de tener una mejor vista”, informó en su radio.
Eran las 15.15. Luego, silencio. Poco después, Hallaron restos del avión de Mantell extendido sobre una gran superficie. El piloto fue decapitado y en su reloj marcaba las 3:18 pm Con esta historia, la leyenda adquirió una nueva dimensión: ahora, además de extraterrestres, podrían ser enemigos peligrosos.
El siguiente ingrediente importante nos los proporciona. George Adamski, un personaje complejo, seguidor del ocultismo y creador de una religión personalun híbrido entre cristianismo y orientalismo, que bautizó como Real Orden del Tíbet. En 1949 comenzó a dar conferencias sobre la platillos voladoresen el que explicó que eran visitantes de otros mundos. También recurrió a los dibujos de Schiaparelli para afirmar que los canales de Marte eran artificiales y habían sido creado por seres inteligentes.
Adamski vio y fotografió varios ovnis, pero habrá que esperar hasta el 20 de noviembre de 1952 para conocer su mayor contribución. Luego, afirmó que él y algunos amigos habían visto en el Desierto de Colorado un barco grandedel cual habían surgido unas personas altas con cabello largo y rubio. Uno de ellos se había presentado con el nombre de Orthon y le había informado telepáticamente que estaban habitantes de venus. El motivo de su llegada a la Tierra habían sido las explosiones atómicas de la guerra mundial, que los habían alarmado mucho. Su misión era establecer la amistad mundial y evitar que las bombas nos destruyeran.
En contactos posteriores, Adamski abordó un barco con el que fue a ver el parte oculta de la lunahabitada por Venusianos, marcianos y saturnianos. Escribió varios libros sobre estas historias, que fueron muy bien recibidos. Inmediatamente aparecieron imitadores en otros países. En España, uno de sus discípulos fue Fernando Sesma, que en los años 50, 60 y 70 se reunía con un grupo de seguidores en el Café Lyon de la calle Alcalá de Madrid.
Con su contribución, Adamski presentó dos claves básicas del mito. En primer lugar está el elemento mesiánico, es decir, hay contacto con extraterrestres, que son bondadosos y quieren salvarnos de nuestro propio mal. Por otra parte, existe la posibilidad de que, de vez en cuando llevarnos de viaje en sus vehículos espaciales.
El tercer elemento llegaría poco después. Aunque Adamski fue incorporado voluntariamente, Hay casos en los que los extraterrestres han capturado humanos y les han realizado todo tipo de pruebas médicas sin su consentimiento.. Esta nueva visión provino del matrimonio Hill, quienes afirmaron haber sido secuestrados y sometidos a análisis los días 19 y 20 de 1961. De esta manera, la cuestión de abducción.
El 4 de octubre de 1957, el mundo, especialmente Estados Unidos, sufrió un shock: sus archienemigos de la URSS habían puesto Un satélite artificial en órbita, el Sputnik.. A partir de ese momento se hace evidente la lucha entre estadounidenses y soviéticos por ganar la carrera espacial. En diciembre, Estados Unidos puso en órbita el Vanguard.
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