China sorprende con un compromiso climático inédito para 2035

Por primera vez, el mayor emisor del planeta se comprometió a una reducción concreta de gases de efecto invernadero. Xi Jinping, a través de un mensaje grabado, confirmó que China recortará entre un 7% y un 10% sus emisiones en 2035, una vez que alcance el pico previsto entre 2025 y 2028. También prometió elevar la participación de energías no fósiles hasta al menos un 30%, con un fuerte impulso a la solar y la eólica.

El anuncio se produjo en una minicumbre climática en Nueva York, convocada por António Guterres y Lula da Silva. Llega justo después de los ataques de Donald Trump al Acuerdo de París y de las dudas en la Unión Europea, que aún no ha definido con precisión sus objetivos para 2035.

Entre expectativas y críticas

Aunque la noticia fue recibida como un espaldarazo al pacto climático, expertos y activistas remarcaron que la ambición sigue siendo insuficiente. Greenpeace advirtió que el recorte debería rondar al menos un 30% para mantener el planeta en un rango seguro. Otros analistas creen, sin embargo, que la descarbonización real de la economía china podría superar lo fijado sobre el papel gracias al crecimiento acelerado de sus renovables.

Guterres aprovechó la ocasión para insistir en que la acción climática no solo es una obligación moral, sino una oportunidad económica: la energía limpia ya recibe el doble de inversión que los combustibles fósiles y está generando empleo, crecimiento y soberanía energética.

El papel de Europa y otros emisores

La Unión Europea llegó con una simple “declaración de intenciones” tras semanas de divisiones internas. Ursula von der Leyen prometió un plan antes de la cumbre de Brasil en noviembre y adelantó un objetivo del 90% de reducción para 2040, además de un fondo de 300.000 millones de euros para la transición global.

Otros países emisores, como Reino Unido, Canadá, Australia, Japón y Brasil, ya presentaron sus planes. India lo hará antes de la cita de Brasil, mientras que EE. UU. mantiene como referencia la NDC aprobada en 2024 bajo la administración de Biden, antes del regreso de Trump a la Casa Blanca.