viernes, diciembre 13, 2024

Estos organismos sintéticos podrían poner en riesgo la vida tal como la conocemos: se llaman "bacterias espejo" y no pueden existir de forma natural

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La investigación en biología sintética ha alcanzado un hito intrigante y alarmante: el desarrollo de organismos creados a partir de moléculas que son Imágenes de espejo de los que se encuentran en los seres vivos naturales. Son “bacterias espejo“representan un avance tecnológico sin precedentes, pero también un riesgo potencialmente catastrófico para la humanidad y el ecosistema global.

Un artículo reciente publicado en Cienciarespaldado por 38 expertos internacionales, advierte que estos microorganismos sintéticos podrían superar las defensas inmunes de humanos, animales y plantas. Además, su posible dispersión en el medio ambiente plantea riesgos irreversibles. Según los autores, liderados por Katarzyna P. Adamala, el momento de prevenir estas amenazas es ahora, antes de que los avances tecnológicos hagan factible su creación.

En 1848, el químico francés Luis Pasteur Descubrió que ciertas moléculas pueden existir en formas que son imágenes especulares no superponibles. Este fenómeno se conoce como quiralidad. Pasteur observó que los cristales de ácido tartárico doblaban la luz polarizada en direcciones opuestas dependiendo de su forma, lo que le llevó a concluir que esta asimetría molecular es una característica distintiva de los compuestos orgánicos. Este hallazgo sentó las bases para comprender la homoquiralidad en los seres vivos, es decir, la preferencia por una orientación quiral específica en las moléculas biológicas. La idea de una “vida en espejo”, compuesta de moléculas de quiralidad opuesta, fue propuesta por Pasteur y ha intrigado a los científicos desde entonces.

La quiralidad, por tanto, es una propiedad geométrica de determinadas moléculas que hace que no sean superponibles con su imagen especular, como ocurre con las manos humanas, que aunque similares, son opuestas y no encajan perfectamente unas sobre otras. En todos los seres vivos conocidos, el ADN está formado por nucleótidos. diestro (gire la luz hacia la derecha) y proteínas por aminoácidos apalancado (Gira la luz hacia la izquierda). Esta disposición quiral es esencial para las interacciones moleculares que mantienen la vida. La creación de organizaciones con quiralidad invertida desafía esta lógica biológica, generando estructuras completamente nuevas que no pueden ser procesadas por los sistemas vivos actuales.

Esta diferencia quiral permite que las bacterias espejo eviten el reconocimiento por parte del sistema inmunológico. Según el artículo, el sistema inmunológico de humanos, animales y plantas no podría detectar o combatir estas amenazaslo que los hace extremadamente peligrosos. Podrían causar infecciones mortales que se propagan rápida e incontrolablemente. Una trampa mortal.

Pero además, la resistencia de estas bacterias a procesos de degradación natural amplifica el problema. En lugar de ser asesinadas por los depredadores microbianos habituales, estas bacterias podrían acumularse y proliferar en el medio ambiente. Esto representa un riesgo global para la biodiversidad, similar al impacto de las especies invasoras, pero a escala molecular.

El desarrollo de bacterias espejo aún requiere superar importantes barreras técnicas. Sin embargo, los avances recientes en biología sintética han reducido estas limitaciones. Los investigadores han logrado sintetizar proteínas y ácidos nucleicos en su versión espejo. Estas moléculas, inicialmente destinadas a aplicaciones como drogas no degradablesPermítanos ahora vislumbrar la creación de organismos completos.

La clave está en la construcción de células sintéticas. Una vez que se domine la tecnología para ensamblar células funcionales a partir de componentes artificiales, el salto hacia la creación de organismos con quiralidad invertida Será inevitable. Aunque esto podría abrir puertas a innovaciones médicas y científicas, también plantea riesgos bioéticos y ecológicos difícil de gestionar.

Los expertos también destacan la dificultad de contener estos organismos si escapan al medio ambiente. Según el profesor Vaughn Cooper de la Universidad de Pittsburgh, Es imposible inocular al planeta contra estas bacterias.ya que serían invisibles a los mecanismos de defensa naturales y resistentes a los tratamientos existentes.

Las bacterias espejo podrían tener un efecto devastador sobre el sistema inmunológico de los seres vivos. Su capacidad para evadir la respuesta inmune haría que las infecciones comunes fueran fatales. Pero su peligro no se limita a la salud humana. En el ecosistema, estas bacterias podrían desplazar a las especies naturales al no estar controladas por los depredadores microbianos habituales.

Un ejemplo relevante es el caso de la bacteriófagosVirus especializados en destruir bacterias. debido a la quiralidad invertidabacteriófagos no reconocerían las bacterias espejoo, permitiéndoles proliferar sin restricciones. Esto no sólo afectaría a los ecosistemas locales, sino que podría desencadenar una crisis ecológica mundial alterando las cadenas alimentarias y los ciclos biológicos esenciales.

El impacto económico también sería significativo. La agricultura, que depende de ecosistemas equilibrados, podría afrontar pérdidas devastadoras. Las plantas esenciales para la alimentación podrían sucumbir a infecciones por bacterias espejo, mientras que los tratamientos farmacológicos tradicionales serían ineficaces.

Dada la magnitud del peligro, los autores del artículo en Ciencia ellos proponen medidas urgentes y coordinadas. La primera recomendación es detener cualquier investigación destinada a crear bacterias espejo. Aunque estas tecnologías ofrecen aplicaciones prometedoras, como la producción de compuestos resistentes, los riesgos superan los beneficios.

También se sugiere establecer estrictas regulaciones globales supervisar tecnologías que podrían facilitar la creación de estos organismos. Inspirándose en modelos como las Directrices de Bioseguridad de Tianjin, los expertos abogan por un enfoque internacional que involucre a científicos, gobiernos y la sociedad civil.

Finalmente, los investigadores llaman a la comunidad científica a priorizar estudios que profundicen en los riesgos asociados. Esto incluye el desarrollo de sistemas de detección y posibles contramedidas, aunque, como afirman los autores, serían insuficiente para mitigar el daño si se propagan bacterias espejo.

El desarrollo de bacterias espejo simboliza tanto el potencial como los peligros de la biología sintética. Aunque todavía faltan años para que estas tecnologías sean factibles, los avances recientes requieren que la comunidad global actúe con precaución y responsabilidad. Sólo mediante una regulación estricta y un diálogo abierto será posible proteger a la humanidad y el medio ambiente de los riesgos asociados con estos organismos revolucionarios y peligrosos.


Fuente Informativa

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