CASOS DE LA VIDA REAL En avenidas transitadas como la autopista Duarte, la carretera Mella y la aven…
CASOS DE LA VIDA REAL
En avenidas transitadas como la autopista Duarte, la carretera Mella y la avenida Venezuela es común ver a hombres vendiendo cocos durante todo el día. Aunque su trabajo pasa desapercibido para muchos, detrás de cada venta hay esfuerzo y el compromiso de sostener a sus familias.
Miguel Ramírez, dominicano de 40 años, vende cocos en la carretera Mella. Comienza su jornada a las 7:00 de la mañana. Compra los cocos en una fábrica ubicada en Villa Mella y los transporta en su motor. “Esto me da para pagar el alquiler de la casa y mantener a mis hijos. No es un trabajo fácil, pero es honrado”, dice.
Su hermano, Luis Ramírez, de 38 años, trabaja junto a él. Ambos reparten la carga y se turnan para cortar los cocos y atender a los clientes. “Nos levantamos a las 5:00 a. m. todos los días. Aquí se vende el coco entre RD$75 y RD$100, depende del tamaño. A veces se gana bien, a veces no, pero nunca dejamos de venir”, comenta.
En la autopista Duarte, Jean Baptiste, un haitiano de 34 años, lleva más de tres años vendiendo cocos. Se suple en una fábrica que le despacha por mayor y empieza a vender desde las 6:30 de la mañana. “Mando dinero cada semana a mi familia en Dajabón. Aquí trabajo todo el día, aunque llueva o haga sol”, afirma. Jean compra cada coco entre RD$35 y RD$45, y los vende entre RD$75 y RD$100, generando un margen de ganancia de aproximadamente RD$40 por unidad. En un día bueno puede vender entre 80 y 100 cocos, lo que se traduce en ingresos netos diarios de entre RD$3,200 y RD$4,000.
Por: @romny_098
Amplíe en www.eldinero.com.do
#PeriódicoelDinero #Vendedores #Coco #Negocio #Informalidad
