Por Manuel García
Moca.- En la histórica Plaza 26 de Julio, donde fue asesinado el dictador Ulises Heureaux (Lilís), se llevó a cabo un acto simbólico de protesta encabezado por el activista social Guanchi Comprés. Durante la actividad se realizó un “tiroteo simbólico” contra Bartolomé Pujals, denunciando un contrato de alquiler que compromete fondos públicos.
Según los organizadores, Pujals habría aprobado el alquiler de un edificio por valor de 1.400 millones de pesos, cifra que, sostienen, habría sido suficiente para construir un nuevo edificio que quedaría como propiedad del Estado.
Este acto simbólico incluyó el lanzamiento de huevos a una fotografía del funcionario, el encendido de velas y mensajes de repudio a lo que consideraron un ejemplo de corrupción e irresponsabilidad con los recursos del pueblo dominicano.
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Guanchi Comprés, conocido por sus constantes denuncias sociales, declaró: “Esta no es sólo una protesta simbólica, es un llamado a las autoridades y al pueblo a exigir transparencia y rendición de cuentas”.
No podemos permitir que el dinero del Estado se desperdicie de esta manera. El evento reunió a ciudadanos indignados que se sumaron al llamado de justicia y exigieron a las autoridades competentes investigar las irregularidades denunciadas.
La Plaza 26 de Julio, con su carga histórica de justicia y rebelión, fue el escenario ideal para este evento que busca mantener viva la lucha contra la corrupción en el país.
